Luego de varios años de gestión, capacitación, formación del equipo docente y frente a la creciente necesidad de continuidad pedagógica de familias y estudiantes, en 2021 iniciamos con el proyecto de Nivel Secundario con primer año, en 2022 con primero y segundo, y así sucesivamente acompañando el crecimiento orgánico de la matricula.

El Cuenco nace en La Villa de Merlo, zona cuya población crece exponencialmente hace ya varios años, principalmente a raíz de la llegada de familias que migran desde grandes ciudades, en busca de una vida más tranquila. Esto implica una necesidad de vacantes escolares en constante crecimiento y una búsqueda de alternativas educativas impulsadas por una mirada integral del Ser Humano.

La pedagogía que nos orienta impulsa la autoeducación y formación permanente de todos los integrantes del proyecto; Cuerpo Docente, Comisión Directiva y Familias.

El cuerpo docente además de su titulación de base, continúa formándose en el Seminario de Pedagogía Waldorf para maestros de Primaria y en el Seminario de Pedagogía Waldorf para profesores de Secundaria. También los integrantes de la Comisión Directiva y el cuerpo no docente se forman en estos Seminarios, haciendo más orgánica la tarea y de una reflexión permanente sobre la práctica educativa, tanto en su aspecto pedagógico como en el organizativo.

Además, la escuela fomenta y organiza, de manera permanente, cursos de capacitación, talleres, conferencias y otras actividades coordinadas por especialistas en la materia, dirigidas no tan solo a la comunidad escolar, sino a la población en general. La tarea de formación se extiende también a los eventos participativos con un fuerte carácter social y comunitario.

La participación activa de todos los integrantes del proyecto, es uno de los pilares que nos sostienen; la inclusión e involucramiento permanente de las familias, son la base de un impulso que promueve desde las prácticas cotidianas, los lazos solidarios y cooperativos; el trabajo permanente en la práctica concreta de la fraternidad económica, como ideal a alcanzar. Esta mirada de lo social tiene fuertes bases en la autogestión.

Nuestra escuela busca necesariamente el ejercicio de un diálogo respetuoso, el desarrollo de la capacidad de escucha y reflexión permanente sobre la tarea, reforzando prácticas de tolerancia y convivencia democrática. La coherencia de los adultos en este plano constituye en sí misma, una sólida base sobre la que se sustenta el aprendizaje de los jóvenes, a partir del modelo digno de imitar.